América del Norte
Se prevé que el calentamiento en las montañas occidentales disminuya la cantidad de nieve, aumente las inundaciones en invierno y reduzca el volumen de los flujos de verano, lo cual exacerbaría la competencia por los recursos hídricos sobreasignados. *** D [14.4, C14.2].
Se prevé que las alteraciones de las plagas, las enfermedades y los incendios tengan crecientes impactos en los bosques, con un período más prolongado de alto riesgo de incendios y grandes aumentos de las zonas quemadas. *** N [14.4, C14.1].
Durante las primeras décadas del siglo se espera que el cambio climático moderado aumente el rendimiento total de la agricultura de secano entre 5-20%, pero con importante variabilidad entre las regiones. Se esperan mayores dificultades en los cultivos próximos al límite de calor adecuado de su margen de variación o que dependen de recursos hídricos altamente utilizados. ** D [14.4].
Se prevé que las ciudades que ya experimentan los efectos de las olas de calor se vean cada vez más afectadas debido al aumento, intensidad y duración de las olas de calor en el transcurso del siglo, con impactos potenciales adversos para la salud humana. La población de ancianos tiene un mayor riesgo. *** D [14.4].
Las comunidades y los hábitats de las costas se verán cada vez más afectados debido a las tensiones producidas por los impactos del cambio climático en interacción con el desarrollo y la contaminación. El crecimiento de la población, unido al creciente valor de las infraestructuras en las zonas costeras, aumenta la vulnerabilidad a la variabilidad climática y al futuro cambio climático, y se espera que las pérdidas sean mayores si la intensidad de las tormentas tropicales aumenta. La adaptación actual se comporta de modo desigual y la preparación para una mayor exposición es baja. *** N [14.4]