IPCC Fourth Assessment Report: Climate Change 2007
Informe de síntesis

1 Cambios observados en el clima y sus efectos

1.1 Observaciones del cambio climático

Desde el TIE, nuestro conocimiento de los cambios espaciales y temporales del clima ha aumentado gracias a la mejora y ampliación de numerosos conjuntos de datos y de sus métodos de análisis, a una mayor cobertura geográfica, a un conocimiento más detallado de las incertidumbres y a una mayor diversidad de las mediciones. {GTI RRP}

Definiciones de cambio climático

Para el IPCC, el término “cambio climático” denota un cambio en el estado del clima identificable (por ejemplo, mediante análisis estadísticos) a raíz de un cambio en el valor medio y/o en la variabilidad de sus propiedades, y que persiste durante un período prolongado, generalmente cifrado en decenios o en períodos más largos. Denota todo cambio del clima a lo largo del tiempo, tanto si es debido a la variabilidad natural como si es consecuencia de la actividad humana. Este significado difiere del utilizado en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMCC), que describe el cambio climático como un cambio del clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana, que altera la composición de la atmósfera mundial y que viene a sumarse a la variabilidad climática natural observada en períodos de tiempo comparables.

El calentamiento del sistema climático es inequívoco, como se desprende ya del aumento observado del promedio mundial de temperatura del aire y del océano, de la fusión generalizada de nieves y hielos, y del aumento del promedio mundial del nivel del mar (Figura 1.1). {GTI 3.2, 4.8, 5.2, 5.5, RRP}

De los doce últimos años (1995-2006), once figuran entre los doce años más cálidos de los registros instrumentales de la temperatura mundial en superficie (desde 1850). La tendencia lineal a cien años (1906-2005), que es de 0,74 [entre 0,56 y 0,92]°C, es más acentuada que la indicada en el TIE, que era de 0,6 [entre 0,4 y 0,8]°C (1901-2000) (Figura 1.1). Entre 1956 y 2005, el calentamiento lineal (0,13 [entre 0,10 y 0,16]°C por decenio) ha sido casi el doble del experimentado en los cien años transcurridos desde 1906 hasta 2005. {GTI 3.2, RRP}

Cambios de la temperatura, del nivel del mar y de la cubierta de nieve en el Hemisferio Norte

Figura 1.1

Figura 1.1. Cambios observados en: a) el promedio mundial de la temperatura en superficie; b) el promedio mundial del nivel del mar según datos mareográficos (azul) y satelitales (rojo); y c) la cubierta de nieve del Hemisferio Norte en el período marzo-abril. Todas las diferencias han sido obtenidas respecto de los promedios correspondientes al período 1961-1990. Las curvas alisadas representan promedios decenales, mientras que los círculos denotan valores anuales. Las áreas sombreadas representan los intervalos de incertidumbre estimados en base a un análisis completo de las incertidumbres conocidas (a y b) y de las series temporales c). {GTI PF 3.1, Figura 1, Figura 4.2, Figura 5.13, Figura RRP.3}

Este aumento de temperatura está distribuido por todo el planeta, y es mayor en latitudes septentrionales altas (Figura 1.2). En la región ártica, el promedio de las temperaturas ha aumentado a un ritmo que duplica casi el promedio mundial de los últimos cien años. Las regiones terrestres se han calentado más aprisa que los océanos (Figuras 1.2 y 2.5). Las observaciones efectuadas desde 1961 indican que, en promedio, la temperatura del océano mundial ha aumentado hasta en profundidades de 3000 m como mínimo, habiendo absorbido los océanos más del 80% del calor incorporado al sistema climático. Nuevos análisis de las temperaturas observadas desde globos y satélites en la troposfera inferior y media arrojan unas tasas de calentamiento similares a las observadas en la temperatura superficial. {GTI 3.2, 3.4, 5.2, RRP}

Los aumentos del nivel del mar concuerdan con el calentamiento (Figura 1.1). El promedio mundial del nivel del mar aumentó, en promedio, a una tasa de 1,8 [entre 1,3 y 2,3] mm anuales entre 1961 y 2003, y de 3,1 [entre 2,4 y 3,8] mm anuales entre 1993 y 2003. No se sabe con certeza si la mayor rapidez de este último tramo refleja una variación decenal o un aumento de la tendencia a más largo plazo. Desde 1993, la dilatación térmica de los océanos ha representado aproximadamente un 57% de la suma de las aportaciones estimadas al aumento de nivel del mar, mientras que la disminución de los glaciares y de los casquetes de hielo contribuyó en aproximadamente un 28%, y las pérdidas de los mantos de hielo polares aportaron el resto. Entre 1993 y 2003 la suma de estas contribuciones ha sido, dentro del margen de incertidumbre, coherente con el aumento total del nivel del mar observado directamente. {GTI 4.6, 4.8, 5.5, RRP, Tabla RRP.1}

La disminución observada de la extensión de nieves y hielos concuerda también con el calentamiento (Figura 1.1). Los datos satelitales obtenidos desde 1978 indican que, en promedio anual, la extensión de los hielos marinos árticos ha disminuido en 2,7 [entre 2,1 y 3,3]% por decenio, y en mayor medida en los veranos, en que ascendió a 7,4 [entre 5,0 y 9,8]% por decenio. En promedio, los glaciares de montaña y la cubierta de nieve han disminuido en ambos hemisferios. Desde 1900, la extensión máxima de suelo estacionalmente congelado se ha reducido en torno a un 7% en el Hemisferio Norte, con disminuciones de hasta un 15% durante la primavera. En términos generales, las temperaturas de la capa superior de permafrost han aumentado en la región ártica, desde los años ochenta, en hasta 3°C. {GTI 3.2, 4.5, 4.6, 4.7, 4.8, 5.5, RRP}

A escala continental, regional y de cuenca oceánica, se han observado también numerosos cambios de largo plazo en otros aspectos del clima. Se han observado las tendencias de la precipitación entre 1900 y 2005 en gran número de extensas regiones. En ese período, la precipitación aumentó considerablemente en algunas partes orientales de América del Norte y del Sur, en el norte de Europa y en el Asia septentrional y central, mientras que disminuyó en el Sahel, en el Mediterráneo, en el sur de África y en partes del sur del Asia. En términos mundiales, la superficie afectada por las sequías probablemente ha aumentado[2] desde los años 70. {GTI 3.3, 3.9, RRP}

Algunos fenómenos meteorológicos extremos han cambiado de frecuencia y/o intensidad en los últimos cincuenta años:

  • Es muy probable que los días fríos, las noches frías y las escarchas sean ahora menos frecuentes en la mayoría de las áreas terrestres, mientras que los días y noches cálidos serían ahora más frecuentes. {GTI 3.8, RRP}
  • Es probable que las olas de calor sean ahora más frecuentes en la mayoría de las áreas terrestres. {GTI 3.8, RRP}
  • Es probable que la frecuencia de las precipitaciones intensas (o la proporción de precipitaciones intensas respecto de la precipitación total) haya aumentado en la mayoría de las áreas. {GTI 3.8, 3.9, RRP}
  • Es probable que la incidencia de elevaciones extremas del nivel del mar[3] haya aumentado en numerosos lugares del mundo desde 1975. {GTI 5.5, RRP}

Las observaciones evidencian un aumento de la actividad ciclónica tropical intensa en el Atlántico Norte desde aproximadamente 1970, y parecen indicar un aumento de esa actividad en algunas otras regiones en que la calidad de los datos es más dudosa. La variabilidad multidecenal y la calidad de los registros de ciclones tropicales obtenidos antes de que se efectuaran asiduamente observaciones satelitales (es decir, hasta 1970 aproximadamente) complican la detección de las tendencias de la actividad ciclónica tropical a largo plazo. {GTI 3.8, RRP}

En promedio, las temperaturas del Hemisferio Norte durante la segunda mitad del siglo XX fueron muy probablemente superiores a las de cualquier otro período de cincuenta años de los últimos 500 años, y probablemente las más altas de los últimos 1.300 años, como mínimo. {GTI 6.6, RRP}

  1. ^  Los grados de verosimilitud y de confianza indicados en cursiva representan expresiones calibradas de incertidumbre y de confianza. Estos términos están explicados en la Introducción, en el recuadro titulado “Tratamiento de la incertidumbre”.
  2. ^  A excepción de los tsunamis, que no son consecuencia del cambio climático. Los aumentos extremos del nivel del mar dependen del nivel promedio y de los sistemas atmosféricos regionales. En el presente trabajo, se define como el 1% más alto de los valores horarios del nivel del mar observados en una estación para un período de referencia dado.